R. Kelly mantenía un lado sórdido de su vida oculto mientras escapaba de la pobreza en Chicago y ascendía a la fama de la música pop, dijo un fiscal al jurado el miércoles en el juicio del cantante por cargos de incitar a menores de edad a tener relaciones sexuales y manipular su juicio de 2008 por pornografía infantil.
La principal abogada de Kelly imploró al jurado, durante sus alegatos de apertura en su juicio federal en Chicago, que no acepten lo que calificó como un retrato de su cliente creado por la fiscalía para presentarlo como “monstruo”.
En la década de 1990 gran parte del mundo conocía a Kelly sólo por sus populares canciones, incluyendo el himno inspirador “I Believe I Can Fly”, dijo el fiscal federal adjunto Jason Julien. Pero “Kelly tenía otro lado ... un lado oculto, un lado oscuro”, agregó. “Este juicio se trata del lado oculto de Kelly”.
Kelly, de 55 años, enfrenta múltiples cargos, incluyendo incitar a menores de edad para tener sexo, producir pornografía infantil y manipular su juicio por pornografía infantil de 2008 por el cual fue absuelto.
Kelly, quien ha negado cometer algún delito, ha enfrentado denuncias por décadas y acusaciones sobre su comportamiento sexual. El escrutinio se intensificó después de la era del #MeToo y por el documental de seis capítulos “Surviving R. Kelly” que detalló acusaciones por abuso sexual que involucraban a jóvenes mujeres y chicas adolescentes.
La abogada defensora Jennifer Bonjean dijo a los jurados que Kelly, en parte por sus dificultades intelectuales, que incluían ser analfabeta, se vio obligado a depender de otros al comienzo de su carrera y a veces se fue por el mal camino por algunos de sus asociados.
“El señor Kelly también puede ser una víctima”, dijo.
De ser declarado culpable en Chicago, se podrían sumar décadas a su sentencia de 30 años a prisión emitida por un juez federal de Nueva York por cargos de usar su fama para abusar sexualmente de sus jóvenes admiradoras.
Sentado en la mesa de la defensa, mientras el fiscal hablaba, Kelly ocasionalmente negaba con su cabeza mientras Julien describía cómo Kelly manipuló y controló a chicas, incluso golpeándolas si no cumplían sus reglas estrictas que incluían decirle "papi".
Julien buscó ilustrar la dimensión de la supuesta explotación de Kelly, diciendo que “repetidamente” tenía sexo con menores que tenían apenas 14, 15 y 16 años, “múltiples chicas, cientos de veces”.
También le dijo al jurado que la evidencia incluye al menos tres videos en los que Kelly tiene sexo con menores de edad.
“No vamos a reproducir horas de pornografía infantil y hacerles ver eso”, dijo el fiscal explicando que verán fragmentos. Agregó: “Los videos son difíciles de ver. Pero es importante ver ... para comprender lo que ocurrió”.
Kelly asintió con la cabeza cuando su abogada dijo al jurado que él no busca un trato especial, sólo un juicio justo.
“Cuando el gobierno quiere retratarlo como un monstruo ... recuerden que estamos hablando de un ser humano”, dijo Bonjean.
Agregó que el jurado no debería sucumbir a lo que ella calificó como “un clima de mafia justiciera” alrededor de Kelly, aludiendo a “Surviving R. Kelly” y años de versiones duras contra Kelly en redes sociales.
“Es verdad que el señor Kelly es imperfecto”, dijo. “En este viaje de la pobreza al estrellato, se tropezó en el camino”. Pero la abogada agregó que confía que el jurado lo encontrará inocente.